martes, 6 de abril de 2010

Admirando el futuro



Hoy, luego de mucho tiempo inactivo, voy a hacer una nueva entrada. La novedad de la misma es que no estaré solo, sino acompañado por el compatriota lanzaroteño Borja Rubio. Quería hacer algo en homenaje al gran Pedro García Cabrera y penso amablemente que este era el lugar adecuado para ello, lo que agradezco enormemente. Primero colocare su poema, acompañado por una interesante reflexión previa. Luego haré lo propio yo mismo.

I Parte


Sin duda, la magia de la esperanza en el futuro, es uno de los motores de nuestro momento actual. Creer que nuestros movimientos del hoy serán parte de un engranaje superior mañana es una sensación indescriptiblemente idílica, metafísica, y extremadamente placentera que no deja de apartarse de la realidad.

En esta tesitura, expreso el profundo afecto que siento por las etapas venideras, inspirándome para ello en la inconfundible y climática literatura del ejemplar canario y mejor persona Pedro García Cabrera, cuyo excelente legado, en ocasiones injusta y dolorosamente despreciado, pertenece a todo nuestro Pueblo, a nuestra Tierra, a nuestro País.

Las Islas Canarias deben liberarse de la encrucijada en la que se encuentra, finiquitando aquellos elementos que les yuga, y la lleva a cotas inimaginables de marginalidad y de no-democracia, haciendo de la premisa ateniense de: “decido, luego existo” una utopía, dentro del marco actual de relaciones intra y extra archipielágicas.

Sin más dilaciones.



En honor a Pedro García Cabrera y a las Islas Canarias, mi País:



Admirando el futuro


Un cántico resuena en mis oídos,

es la melodía de la salvación,

gritando a los cuatro alisios vientos,

la muerte de la opresión.


El eco del campesino

que la tierra seca labró,

los gritos del marinero,

que en la costa de nuestra Patria faenó.


Siete rosas bañadas por un océano,

un océano de dulce sal,

desde Timanfaya a La Restinga,

buscando la Libertad.


Nosotros queremos pues la absolución,

queremos saber qué hay más allá de Europa,

cantándole al mundo,

con un timple como primeras notas.


Silba por la Gomera,

de risco en risco saltando,

es el fantasma de la libertad

que viene asomando.


Un último esfuerzo redentor,

que Secundino y Ascanio nos guíen,

rompamos cadenas parias,

rompamos corazones de alambre,

que mi Tierra,

que mi Tierra no la ensucie nadie.


Despierta mi Pueblo, despierta.

Despierta de este terrible dolor,

grítale al cielo que incluso con calima,

se vislumbra mejor el Sol.


Silba Silba, Divina Libertad,

que tus hijos te esperamos,

ansiosos por limpiar nuestro sudor,

de nuestras cansadas manos.


Borja Rubio Francisco.



II Parte


Admirar el futuro, como el que admira el espectaculo que la naturaleza plasma ante nuestros ojos diariamente. Tener esperanza en un mañana diferente, sin constantes ofensas o maltratos a un pueblo, o a una clase. Lo mejor está por venir, pues estimo que seremos partícipes de grandes cambios en nuestro país y en el mundo. Espero que estos cambios sean para bien, mas no solamente eso. Deseo que seamos participes todos y cada uno de los interesados en una sociedad mejor, ya sea en nuestra tierra o el mundo, del proceso social que se avecina.


Hoy más que nunca hay que luchar, hay que unirse a los que bregan por la humanidad. Hemos de crear caminos nuevos, pero también aprender de lo pasado. Hay muchos errores que evitar, y muchas virtudes que recoger, de otros que andaron antes que nosotros la senda de la justicia social. Gentes como el gran Pedro García Cabrera, maravilloso ejemplo escogido por el compañero Borja, y como justamente dice, poco conocido por los isleños actuales. Rompaños las cadenas y echemos a andar.


Brisas nuevas nos inundan

y esas viejas peticiones

unidas en las canciones

y melodias que abundan.

Son notas que ahora fundan

una nueva esperanza

que no es en nada mansa

sino grande y combatiente

como masa inteligente

hacia el futuro avanza.


Viendo la solemnidad

que nos brinda este destino

vemos por este camino

mucha gente en cantidad

Abren la fatalidad

y miran con optimismo.

Confiando en si mismo

el pueblo avanzara

y pronto conquistara

la salida del abismo.


Ya se va quebrando el muro

poco a poco y con paciencia

ya retorna la conciencia

y se evade de lo oscuro.

El pasado fue muy duro

mas no vale ya la pena.

Llego la hora de la cena

y de ponerse a cantar

luego poder quebrar

esas odiosas cadenas


El fermento libertario

cuece pronto nuestro vino

propiciando un camino

para el pueblo canario

libre de estos mercenarios

con destino universal.

Desterremos pronto el mal

que a nuestra gente embarga

liberemos ya la carga

de opio, cadenas, y cal.


Buscando la libertad

como Garcia Cabrera

el alma se desespera

en pos de la humanidad

Alarde de caridad

que nos llega del pasado.

Ya me siento animado

admirando el futuro

pues este nos viene puro

sin silencio amordazado.



Pedro el gasio 7-04-2010


Igualmente a Pedro García Cabrera y a la patria canaria, grande y universal.